viernes, 20 de julio de 2012

Especial "The Host"

Bueno chicos.... Lamentablemente no votaron muchas personas en la encuesta (8 no mas) Pero igualmente tenemos como siempre un ganador. O en este caso una ganadora.... !Wanderer /Wanda! Nuestra hermosa alien cuyo compañero es mi personaje favorito de este libro.... Mi adorado Ian O'Shea!
Bueno en fin, aquí les dejo en primer lugar una ligera caracterización de la ganadora y luego la historia...
Disfruten Hosters! En especial mi querida amiga blogger Queen A...quien me ha dicho más de una vez que ama esta historia tanto o más que yo...Te dedico este especial!


WANDERER!


Según el libro de The Host de la famosa escritora Stephenie Meyer: Wanderer es una extraterrestre que adquiere su nombre debido al gran número de planetas en el que ha habitado. Desde el Origen hasta terminar en la Tierra en el cuerpo de Melanie Stryder, una humana rebelde que es capturada luego de una expedición donde trataba de encontrar a su prima. Wanderer al adquirir los recuerdos de Melanie, también empieza a compartir sus sentimientos. Creando un espiral de emociones que la llevan a buscar a la familia de Melanie. En el desierto, encuentra lo que buscaba y quizá más. Allí Wanderer adquiere su nuevo nombre Wanda y el cariño y respeto de los humanos que se encuentran refugiados en aquel lugar. En especial el de Ian O'Shea. Un chico muy noble que aprende a respetar a la pequeña huesped y empieza a desarrollar sentimientos por ella durante el transcurso de la historia mientras que Wanda se debate entre su amor por Jared, el amor de Melanie y él. 
Wanda es un alma muy noble, caritativa, colaboradora y sobre todo muy cariñosa y atenta con quienes quiere de verdad. Tiende a desconfiar en un principio de los humanos pero luego empieza a entenderlos de cierta manera. Aprende a amar y a desempeñar un papel importante en la vida de estas personas. Aprende a que tal vez, la humanidad y la Tierra son su verdadero hogar. Y que su verdadero amor es tan humano como su esencia.

Especial: El primer "Te Amo".

Estoy algo confundida y medio grogui cuando despierto gracias a la luz tenue que se ha colado por las grietas de la habitación que compartimos Ian y yo. La luz se cola a través de mis párpados causándome una ligera picazón y molestia en ellos así que con mis pequeñas manos a las cuales no me acostumbro, me cubro y me escondo de aquella luz mientras suelto un largo y cansado suspiro. 

Miro hacia mis lados. Estoy acurrucada en el colchón y no logro ver con claridad. Siento una presión sobre mi abdomen, gracias a mi tamaño logro acurrucarme y girar hasta verlo. Descansa plácidamente acurrucando su cabeza pecho y su brazo abrazándome. Primera vez que Ian no se desparrama por la cama mientras duerme.  Me reí bajito ante este pensamiento solitario.

Hecho de menos a Mel dentro de mi cabeza de vez en cuando. Cuando me siento triste o sin ganas de hacer nada. Cuando Ian está tan cerca de mí o cuando hay alguna cosa que no sé que decir ni el cómo responder.
Sin embargo sé que si aún estuviera en el cuerpo de Mel, estaría en una batalla constante entre mis sentimientos y el cuerpo. Pues a Ian y a Jared les correspondía cada uno respectivamente.

Ahora, quizá todo es mas fácil: Pet nunca había tenido a nadie a quien amar. ¿Y cómo? Si tan solo su cuerpo era demasiado pequeño como para soportar la carga de un amor tan grande que, por cuestiones de suerte o del destino: yo he podido manejar muy bien.

Mis sentimientos están claros. Inversamente han cambiado con el pasar de estos últimos dos años. Mientras que Ian ha crecido dentro de mí, hasta el punto en que mi mente y todo mi alrededor gira en torno a sus ojos azules y su perfecto ser, Jared ha sido, más que todo, un amigo. Aunque de vez en cuando recuerdo aquellas cosas que sentía por él, pero el solo hecho de pensar que le estoy haciendo mal a Ian, me desorienta y me hace sentir culpable.

Ian empieza a abrir los párpados. Su cabeza reposa en mi hombro lleno de pequeños puntos dorados. Sus ojos azules brillan más intensamente que el cielo y el mar juntos. Son dos zafiros encendidos tan solo por sus sentimientos. Su pelo oscuro está algo más largo que desde hace dos años pero sigue siendo tan hermoso y atractivo como desde el primer día que lo amé.

- Buenos días, princesa -me susurra mientras me da un beso en la oreja que me hace estremecer.

- Buenos días, dormilón -respondo mirando sus ojos -Has dormido desde la tarde de ayer.

- He soñado contigo. No quería despertarme -dice besando mis mejillas lentamente hasta alcanzar mis labios.

Me empiezo a sonrojar como una estúpida. Cosa que detesto de este cuerpo. Que transmite emociones muy fácilmente, no se mentir, o bueno, aún menos que antes. No se hacer trabajos duros y casi siempre termino con los chicos pequeños o cuidando al hijo de Mel y Jared: Jay.

Ian se aparta y me estudia con deseo.

- Eres aun más hermosa en las mañanas. Y en las tardes, y en las noches. Siempre -dice él.

- Y tu eres aún más perfecto de lo que imaginaba -respondo

Lo beso sin preocuparme de nada hasta que...

-! Wandaa! !Wanda! !¿Ya estas despier...........ta -Jamie entra en la habitación contemplando la escena.

- !Demonios Jamie! -grita Ian lanzándole una almohada que él esquiva.

Yo suelto una risita tonta.

- !Perdón! !Pero el tío Jeb necesita a Wanda y a Burns! !Me ha pedido que los llame! -responde -creo que es para alguna nueva excursión.

- ¿Y no podías tocar? !Necesitamos privacidad hombre! -refunfuña Ian cerca de mi oreja.

De nuevo río

- Tranquilo Jamie. Dile al tío Jeb que voy ¿de acuerdo? -digo.

- De acuerdo. Solo asegúrate de no llegar tarde. Ayer te esperamos más de dos horas -dice antes de salir de la habitación.

Me sonrojo de nuevo y trato de levantarme de la cama. Solo llevo una camisa de tirantes azul marina y mis bragas. Ian se concentra en mi lo que me hace sentir avergonzada. Tomo unos vaqueros y me coloco mis zapatillas habituales y me recojo el pelo en una coleta alta. Ian se coloca una camisa negra y salimos de la habitación no sin antes, en medio del pasillo oscuro. Sus manos me levantaran del suelo y, apretándome contra su cintura, dejando un espacio reducido entre su boca y la mía diga:

-Te amo

Me sonrojo y mi lengua tiene un nudo. Nunca se lo he dicho, tan solo un par de te quieros. Pero nunca eso pero luego, en mi mente y en mi interior algo se remueve y me llena de energía y desata el miedo y el rechazo para finalmente decir.

- Yo también te amo.

2 comentarios:

  1. OH-DIOS-MÍO. Graciasgraciasgraciasgraciaaaaaaaas! The Host es mi libro favorito!!!! No sabes la ilusión que me hace que este especial sea sobre Ian y Wanda!!!!!! Y mas ilusión aun cuando me lo has dedicado! De verdad, muchísimas gracias! Has escrito esta mini historia exactamente igual que yo me imaginaba su relación! Besos:)

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  2. que puedo decir....me quede con la boca abierta y con ganas de mas...estuvo mejor que genil...Ian y Wanda <3

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