miércoles, 16 de mayo de 2012

Capítulo VII

Bueno tuve un tiempo ahora así que subo el capi 7. Espero que les guste

Las prácticas ballet son un poco incómodas. Lila quiere que Light y yo hagamos de esas piruetas y saltos que hacen las bailarinas profesionales. Es solo que no sé si puedo confiar plenamente en él. Aún no estoy convencida de qué siento y cómo es nuestra relación. Que casi siempre se basa en un tira y afloja. En las tardes vamos a los Entrenamientos para los Juegos. Nos juntamos con Liam y Dan. Liam es un chico alto, moreno y debe tener unos dieciocho años. Dan por su parte es pequeña, tiene catorce pero es bastante letal usando aquellos cuchillos de hojas redondas. Light y yo fingimos estar contentos y conversamos tratando de ser amables. Los chicos del 4, otros Profesionales. Seth y Hilly se unen días después. Son primos. Ambos de ojos azules marinos y pelo cobrizo. Su situación es algo deprimente aunque siempre hagan bromas de quien matará a quien.
Rya no se ha aparecido en días. Y Dima y Nial se han ocupado de varios asuntos importantes. Por lo que casi siempre estamos Light y yo solos junto con un par de avox, traidores del Capitolio a quienes les cortan la lengua y sirven como esclavos. Light encontró la foto de mi hermano y el collar de Kirk y me los dio. Llevo conmigo la foto de mi hermano pero no el collar de Kirk, no porque no quiera sino porque no sé si es correcto con lo liada que estoy entre él y Light. Y el hecho de que conversemos todas las noches, tampoco ayuda a la situación.
El tercer día de entrenamiento es bastante agotador. Estuve practicando nudos con Light y he de admitir que me he vuelto bastante buena haciendo trampas. Light es un buen pescador y recolector, sabe todas las plantas posiblemente comestibles. En cuestión de armas, sabe utilizar la lanza, la espada y lanza unos cuantos cuchillos. No debe ser difícil para él el sobrevivir a los primeros días. Liam me sigue a la zona de camuflaje. No he conversado mucho con él pero si quiero que se convierta en mi aliado, tendré que comportarme mejor.
−Hola –dice
−Hola
−Te he visto perturbada. ¿Sucede algo? –miro un bol lleno de papilla de bayas y la empiezo a aplicar en mi brazo.
− En realidad, quizá  estoy… no sé, el estar aquí no es fácil –digo al fin
Liam suelta una risita.
−No es fácil para ninguno –él empieza a mezclar tierra con otras sustancias a un lado y continua –Mis padres también eran parte de la Rebelión. De hecho me enseñaron a luchar siempre por lo que quiero. Por ser justo. Hemos salido adelante por la cantera y mi hermano que es ahora agente de la paz pero… me gusta pensar que esto no durará para siempre.
Lo miro con los ojos abiertos. Al parecer aquí hay más secretos de los que te puedes imaginar.
−Yo también lo creo así. Lástima que solo uno, quizá pueda verlo –respondo.
No decimos nada más. En parte porque llega uno de los entrenadores a nuestra sección. Y la otra, porque sabemos que tenemos la razón.

−1…2…3…y –dice Lila indicando el último salto del ballet.
Estamos en un campo despejado. Se nos permitió practicar aquí por el espacio y porque todos están espiando lo que los demás hacen. Light está sin camisa, trae unos vaqueros y unas zapatillas deportivas. No puedo evitar asombrarme de lo musculoso que es. Allí va parte de mi concentración. Yo estoy vestida como lo en la Academia de Ballet. Zapatillas rosadas, un conjunto de color blanco y una falda negra. Ya hemos hecho la mayor parte del baile pero hay un último giro –el más largo –que no logramos hacer bien.
Luego de tres intentos Lila se enfurece, suelta un gruñido y se va. No la entiendo, no es nuestra culpa que solo tengamos hasta mañana para esto y luego la entrevista, sin mencionar los próximos días en la arena. Son muchas cosas en nuestra cabeza como para ocuparnos de este baile.
Me siento en el suelo de concreto con los pies adoloridos y la cabeza a punto de explotar. Light se queda a mi lado y me tiende una mano. Lo miro con desdén.
−Debemos hacer esto –dice.
Suspiro y me levanto. Por lo menos Light es menos chillón que Lila.
−De acuerdo solo el último salto ¿vale? –dice a unos tres metros de mí.
Estoy medio grogui así que me siento débil y tonta.
− Confía en mí –dice.
Abro los ojos sorprendida. Sus palabras me hacen despertar y me quitan cualquier duda sobre lo que él quiere. Me lanzo a sus brazos que me sostienen en el aire y me elevan.
Lo miro a los ojos y mi corazón da un vuelco.
Ahora sí, no sé qué hacer.

2 comentarios:

  1. Adorable! Yo tambien hago ballet, y estoy súper emocionada!

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    1. Gracias por tu apoyo Queen A! El hecho de que tu comentes y te guste mi historia me hace quere escribir más! :)

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